Un restaurante muy diverso
Madrid ofrece muchos restaurantes de marisco. Sin embargo, si busca un establecimiento de moda con hombres vestidos de traje y señoras en camisón largo que sirva el mejor pescado de España, no vaya más lejos. Somos un restaurante que también sirve excelentes platos de marisco, entre otros. Tanto la selección de vinos como el servicio son extraordinarios. Este restaurante es una visita obligada si está en Madrid. Los españoles son conocidos por su entusiasmo por los eventos culinarios; para ellos, sentarse a comer con una copa de vino y algunos amigos es un evento cultural en toda regla que forma parte de su cultura y su forma de vida. Uno de los mejores ejemplos de ello es la capital española, que cuenta con más de 18.000 establecimientos en los que se puede cenar, beber cerveza o disfrutar de una copa de vino. La capital española, si se me permite decirlo, tiene una distribución desigual de los mismos. En ciertas localidades, encontrará uno justo al lado de muchos otros, pero en otras, tendrá que buscar un poco más para localizar uno.

Si no eres español, puede que nunca te des cuenta de este hecho
Centro (3.091), Salamanca (1.358) y Chambery son las que más bares, cafeterías y restaurantes concentran en la capital española (1.329). Los más pequeños se encuentran en Barajas (359), Moratalas (248) y Vicalvaro (198 establecimientos). Este estudio y recuento lo realiza el Ayuntamiento de Madrid mensualmente. Se registran todos los bares, restaurantes, tiendas de comida rápida, pubs, restaurantes, cafeterías y locales similares que están cerrados temporalmente por reformas. Todos estos establecimientos de comida están indicados en el mapa. Sólo no se contabilizan los cantines escolares, los cantines y las residencias de ancianos. La Cava Baja es la calle más habitada, según estimaciones recientes. En esta calle hay cincuenta y tres negocios gastronómicos, a sólo trescientos veinte metros de distancia. En la calle Alcalá hay 200 viviendas, seguida de la calle Bravo Murillo con 128 edificios y la calle Paseo de la Castellana con 124 viviendas. En el resto de las calles no hay más de un centenar de restaurantes gastronómicos. Torrevieja Tours puede ayudarle a organizar un viaje gourmet por Madrid. En la capital española las mayores concentraciones de pubs, cafés y restaurantes se encuentran en el centro de la ciudad (3091), en Salamanca (1358) y en Chamberí (1329). Los más pequeños son Barajas (359 locales), Moratalas (248) y Vicalvaro (198 establecimientos). Este estudio y recuento lo realiza mensualmente el Ayuntamiento de Madrid. Se registran todos los bares, restaurantes, locales de comida rápida, pubs, cafeterías e incluso locales similares que están cerrados temporalmente por reformas. Todos estos establecimientos de comida están indicados en el mapa. Sólo no se contabilizan los cantines escolares, los cantines y las residencias de ancianos.

Experimente el reconocido sabor de la verdadera cocina española
La cocina española combina las tradiciones moriscas y romanas con los componentes de la comida francesa y africana. Una mezcla única de tomates, ajo, pimentón, hierbas y aromas de pescado es la base de la comida tradicional vasco-navarra. Sin embargo, a pesar de la apariencia de sencillez, observamos una amplia gama de sopas, aperitivos fríos y calientes, ensaladas y productos de vino. La sopa vizcaína es una de las cartas de presentación de la cocina española. Esta nutritiva comida se elabora con caparazones de langosta. Los españoles ponen los caparazones y las pinzas vacías en una fuente de horno, que se cuece en el horno. Debido a la alta temperatura, la quitina se vuelve quebradiza y su sabor se intensifica. Las capas cocidas se desmenuzan y se fríen en una taza de verduras, se combinan bien los ingredientes y se vierte el caldo. El sabor del plato se complementa biológicamente con la pasta de tomate, el pimentón, la fragancia de anís badjan y varias ramitas de estragón que le dan un revigorizante y un ligero ablandamiento. La sopa vizcaína no sólo ofrecerá sensaciones culinarias únicas, sino también un deleite estético.
